07 Nov Herpes Labial ¿Qué es? Síntomas Causa Prevención
¿Qué es el herpes labial?
Es una infección viral común, causada por el virus del herpes simple tipo 1 (HSV-1). Se transmite de una persona a otra a través de una infección por frotis, por gotas o contacto directo cercano.
Una vez infectado, el virus del herpes simple nunca abandona su cuerpo. El herpes labial se manifiesta a través de una herida en la piel alrededor de la boca o dentro de ella. Después de la primera infección, el virus del herpes simple pasa de las células de la piel a las células nerviosas y permanece allí de forma permanente e inactiva, pero puede reactivarse e infectar las células de la piel nuevamente.
Síntomas del herpes labial
Es posible que niños menores de 5 años contraigan herpes labial, pero las lesiones usualmente son confundidas con aftas, sin embargo las aftas solo afectan la membrana mucosa del interior de la boca y no los labios o encías como el herpes. Los signos, síntomas y duración del herpes labial varían, dependiendo de si es el primer brote que se padece o es un brote de recurrencia.
Síntomas de un primer brote
La primera vez que se contrae herpes labial los síntomas pueden empezar a notarse recién 3 semanas después de haber estado expuesto a la fuente del virus.
Las llagas pueden permanecer por días y cuando se vuelven ampollas, tardan de dos a tres semanas en sanar totalmente. Los síntomas principales de un primer brote son: fiebre, dolor en las encías, dolor de garganta, dolor de cabeza, dolores musculares y ganglios linfáticos inflamados.
Síntomas en un brote de recurrencia
Un brote de herpes recurrente generalmente ocurre siempre en el mismo lugar y tiende a ser menos extenso que el primer brote. Esto significa que pueden desaparecer en menos tiempo y no siempre presentan dolor de garganta o muscular. Pero si fiebre.
Manifestación de los síntomas: etapas del herpes labial
Etapa 1: hormigueo
Si experimenta un hormigueo y picazón desesperada alrededor de la boca, es probable que tenga herpes labial. El hormigueo suele ser la primera manifestación del desarrollo de herpes labial en la superficie de la piel. La zona puede arder o picar. El tratamiento durante esta fase puede reducir su gravedad y duración, pero no evitará su formación.
Etapa 2: ampollas
Alrededor de uno o dos días después de sentir la fase de hormigueo, generalmente el herpes empieza la formación de ampollas.
Las ampollas están llenas de líquido transparente y aparecen en la superficie de la piel y alrededor de cada una, la piel es roja e irritada.
Las ampollas pueden aparecer alrededor de los labios, dentro de la boca y en la garganta. Usualmente no salen en más de una zona a la vez. En esta etapa debe consumir más agua y mantenerse hidratado.
Etapa 3: lesión abierta
A los pocos días de aparecer en la superficie de la piel, las llagas se abren. Son rojas y poco profundas, pero más contagiosas. Evite tocarse o pellizcar las llagas, ya que puede empeorarlas, contagiar a alguien más o causar una infección bacteriana en la piel.
Etapa 4: formación de costras
Después de la etapa 3 la ampolla se seca y empiezan a formarse costras. Cuando están secas se ven de una coloración amarilla o marrón. Evite pellizcar, o podría esparcir más llagas en la zona. Las compresas frías, calientes y la pomada de óxido de zinc pueden mejorar la recuperación de esta etapa.
Etapa 5: curación
En la ultima etapa, la ampolla con costra cicatriza completamente. Para que la costra se mantenga suave y la irritación disminuya, intente utilizar emolientes que contengan óxido de zinc o aloe vera. La costra desaparecerá lentamente al descascararse. El herpes labial generalmente no deja cicatrices.
Causas del contagio de herpes labial
Lavarse las manos con poca frecuencia
Las manos tocan lugares de alta absorción como la boca y los ojos diariamente, y si previamente tuvimos contacto con objetos del exterior, en el transporte público o restaurantes, el HSV-1 podría estar adherido en nuestras manos, esperando para ingresar al cuerpo. Lavarse las manos frecuentemente con jabón evita las infecciones, ya que se deshace de los virus y bacterias alojados en nuestra piel.
Compartir utensilios higiénicos de uso individual
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan no compartir productos de higiene personal bajo ninguna circunstancia. Cepillos de dientes, jabones y toallas son algunos ejemplos.
El virus puede alojarse un lapso de hasta 48 horas en superficies externas, y si tenemos contacto con un objeto infectado en ese tiempo, contraeremos el virus del herpes oral.
Contacto físico directo
El virus puede transmitirse de una persona infectada a una persona sana por contacto físico directo como los besos o el sexo oral, así que actúe con cuidado.
Cómo prevenir el herpes labial
Aplicar bálsamos de protección labial
Estos bálsamos evitan la aparición de un nuevo brote de herpes labial, protegiendo los labios de los factores externos desencadenantes del brote recurrente, como el sol, el calor intenso o el sudor.
Regular la exposición al sol y al frío
La exposición solar, el frío extremo y la radiación ultravioleta constituye un potente agente desencadenante y estimulante del herpes simple recurrente. Utilizar protectores solares y de cuidado de la piel puede ayudar.
Controlar el estrés emocional
El estrés es un estado que afecta a nuestro organismo de forma general, llegando a producir una bajada de las defensas naturales y consecuentemente un nuevo brote del virus del herpes labial.
Cuidar los traumatismos mecánicos o quirúrgicos
Durante ciertos procedimientos odontológicos se manipulan tejidos periodontales, donde la intervención puede representar un factor desencadenante para la reaparición del herpes labial recurrente.
La reactivación del virus del herpes simple es posible como consecuencia de extracciones dentales, ya sea por el trauma de los tejidos después de la intervención quirúrgica o bien por efecto de la inyección del anestésico local.
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