07 Oct Flemón Dental | Causas, Tratamiento, Complicaciones
El Flemón
El término Flemón también puede encontrarse descrito como «celulitis»(Inflamación), ambos vócablos se refieren a una inflamación difusa de la piel y tejido subcutáneo, debido a una infección. Destacando que, actualmente, la mayoría de las fuentes académicas usan las dos palabras indistintamente. Sin embargo, flemón puede considerarse como un término un tanto anticuado, que inicialmente era sinónimo de absceso.
Celulitis y filemón
Originalmente, existía una distinción entre “celulitis” y “flemón” en un entorno dermatológico, hasta el punto de que en ocasiones se consideraba el segundo como consecuencia del primero. Pero, esta distinción se ha perdido, ya que ambos son en esencia, una infección purulenta de tejidos blandos.
¿Qué es un flemón dental?
Un flemón dental puede clasificarse como un tipo de infección odontogénica, que ocurre en un diente o en la encía por diferentes bacterias. Esta infección hace que se produzca una bolsa de pus dentro de la boca, que es lo que se define como flemón.
Las defensas orales
Los tejidos orales experimentan renovaciones y cambios celulares de forma constante. En consecuencia, los microorganismos que buscan colonizar las superficies mucosas, desarrollan estrategias para contrarrestar dicho proceso.
Por lo tanto, la mucosa oral posee tres tipos de defensas microbianas. Una barrera física de tejidos epiteliales, otra barrera derivada de constituyentes salivales clasificada como innata. Y, una última inmunidad adaptativa asociada con tejidos linfáticos.
Factores como la presencia de cuerpos extraños, suciedad, lesiones traumáticas o isquémicas, sensibilizan los tejidos blandos, predisponiéndolos a infecciones. Cuando esto ocurre, la composición microbiana oral normal, es capaz de invadir los tejidos profundos.
Las infecciones odontogénicas
Las infecciones orofaciales que afectan la piel o las membranas mucosas de la cara y la cavidad bucal, son bastante diversas. Estas infecciones pueden ser localizadas e indolentes o invasivas y potencialmente mortales.
Asimismo, pueden clasificarse como odontogénicas y no odontogénicas. Las primeras incluyen caries dental, enfermedad periodontal e infecciones supurativas del espacio profundo facial.
Las segundas, incluyen infecciones piógenas que abarcan tanto la cara como el cuello, infecciones de la mucosa oral, candidiasis orofaríngea, sialoadenitis y parotiditis.
Causas: ¿Por qué aparece un flemón dental?
Los motivos de esta infección pueden ser varios, y aunque hay algunos más frecuentes, es necesario consultar a un especialista para determinar la causa real. Dentro de los más frecuentes se mencionan:
Lesiones cariosas
La caries dental, es una enfermedad bacteriana de los dientes caracterizada por la destrucción del esmalte y la dentina. Es a menudo la causa subyacente del dolor dental.
Cuando una lesión cariosa incide en la pulpa dental, se produce una pulpitis, que finalmente se transforma en lo que se conoce como necrosis de pulpa o pulpar.
La necrosis de pulpa no tratada es responsable de múltiples efectos negativos en la estructura bucodental. Dentro de los cuales se cuentan los abscesos localizados e infecciones diseminadas hacia el tejido blando circundante, dando como resultado el flemón o celulitis dental.
Tratamiento
El tratamiento inmediato implica la terapia con antibióticos para la celulitis, quizás drenajes de abscesos.
El tratamiento definitivo suele necesitar un trabajo de conducto o extracciones dentales.
Pericoronitis y celulitis secundaria
La pericoronitis es la inflamación de los tejidos blandos que rodean la parte superior (corona) de un diente parcialmente erupcionado. Esto es bastante común con la muela del juicio, también se conoce como diente impactado.
Como resultado, ocurre que la placa bacteriana y los restos de comida, se acumulan debajo del colgajo de la encía que cubre la pieza dental en erupción. Al cumplirse estas condiciones, el resultado natural es inflamación del colgajo, dolor, sensibilidad y mal sabor causado por el pus que supura debajo del colgajo.
El avance a un estado grave, incluye el desarrollo de celulitis, incapacidad para abrir la boca por completo, y en casos aún más graves, vías respiratorias bucales comprometidas.
Tratamiento
El uso de enjuagues bucales salados calientes y la irrigación debajo del colgajo, pueden resolver los síntomas primarios en la mayoría de los casos.
Para pacientes que no responden ante las técnicas de higiene básica o que la celulitis ha avanzado a sistémica, se usan tratamientos con penicilina y otros analgésicos adecuados.
La derivación al dentista debería realizarse lo más rápido posible para que el paciente pueda ser evaluado. Definiendo, si un tratamiento sintomático es suficiente hasta que se complete la erupción. O, si por el contrario, es necesaria una terapia quirúrgica para extirpar el colgajo de la encía o en su defecto, el diente subyacente.
Avulsión de dientes
La avulsión de dientes es una lesión traumática en la que la pieza dental se desprende completamente del hueso alveolar, exponiendo el ligamento periodontal. Las complicaciones postraumáticas pueden ocurrir diferidas en el tiempo, afectando toda la estructura de soporte.
Algunos de los efectos por no tratar la lesión, serían la reabsorción radicular, obliteración del canal o necrosis pulpar. Así como, las lesiones de tejidos blandos o fractura óseas, siendo la necrosis de pula la complicación post traumática más común.
Tratamiento
El tratamiento de avulsión dental es complejo, debido a que el tiempo es de suma importancia. Un tratamiento convencional permite la reinserción del diente, pero, para que esto ocurra la atención odontológica necesita ser inmediata. Como referencia se explica que a una hora posterior al traumatismo, aún puede haber vitalidad celular, aumentando el porcentaje de éxito del tratamiento.
Desafortunadamente, cuando ocurre un accidente tan traumático, generalmente se desconoce el manejo de un diente avulsionado. Dando un largo retraso para la replantación exitosa, adicional a unas condiciones de almacenamiento desfavorable para el diente, aumentando la complejidad de la rehabilitación.
De esta manera, aumentan las posibilidades de necrosis pulpar, flemones, reabsorciones, entre otros efectos.
La enfermedad de las encías
Es habitual que los pacientes que padecen la enfermedad periodontal tengan flemones recurrentes. Teniendo en cuenta que la periodontitis es, en esencia, la formación de bolsas de bacterias debajo de la encía. Se genera un entorno favorable para la proliferación de flemones.
Tratamiento
Además de tratar los flemones con tratamientos antibióticos o de drenaje, se necesita controlar la enfermedad periodontal. Esto incluye una serie de procedimientos de desinfección, que van desde la eliminación de sarro, hasta limpiezas con procedimientos quirúrgicos.
Cuidado deficiente luego de una cirugía oral
Los flemones, son causados con mayor frecuencia por estreptococos A, y Staphylococcus aureus. Estas bacterias ingresan a través de aberturas, convirtiendo los periodos post operatorios dentales en factores de riesgo.
Método de prevención
En este caso, es necesario seguir las pautas dadas por el dentista y cumplir con los métodos de higiene recomendados.
Síntomas frecuentes de un flemón dental
- Es posible apreciar una pequeña deformación en el rostro, a causa de la inflamación.
- Malestar general debido a la propia infección, acompañado por episodios de fiebre.
- Dolor crónico en dientes o molares, que suele presentarse en etapas de reposo y aumentar gradualmente al momento de masticar o con el cepillado diario.
- Mal aliento o mal sabor de boca, ocurre si el pus del flemón se mezcla con la propia saliva.
Tipos de flemón dental
Flemón localizado
Se describe de esta manera a la acumulación localizada de pus en el hueso alveolar del ápice de la raíz del diente.
Flemón diseminado
Sucede cuando la infección se extiende a los principales espacios faciales de la cabeza y cuello, como lo demuestra una inflamación intensa, surgen complicaciones.
En este caso, la celulitis alcanza una complejidad potencialmente mortal, como el sustancial compromiso de las vías respiratorias. Mientras que los flemones maxilares pueden aumentar el riesgo de complicaciones graves. Que incluyen pérdida de la visión, trombosis del seno cavernoso y compromiso del sistema nervioso central.
Por lo general, estos pacientes son hospitalizados, recibiendo atención quirúrgica y especializada en enfermedades infecciosas. El procedimiento regular, incluye imágenes a través de tomografías y drenajes quirúrgicos, si se detecta formación de múltiples abscesos.
Los tratamientos con antibióticos intravenosos de amplio espectro, se inician casi de forma inmediata, incluyendo cobertura para anaerobios evitando la propagación.
Tratamiento: Cómo se trata el flemón
Diagnóstico
En primer lugar, el diagnóstico se centra en determinar el tipo de flemón y qué es lo que lo está causando. El objetivo principal es eliminar la causa del proceso flemonoso para que se logre el tratamiento y se pueda prevenir la recurrencia.
El procedimiento
El tratamiento conservador cuando el flemón es leve con inflamación sin signos de filtrado, consiste en antibióticos.
Cuando son casos graves, se necesita cirugía para drenar el flemón, extirpar los tejidos muertos, previniendo la propagación de la infección. La cirugía se realiza bajo anestesia local, donde se limpia la cavidad que contiene el proceso flemonoso, con soluciones antibióticas y antisépticas.
Finalmente se retiran los tejidos muertos, administrando antibióticos intravenosos durante el periodo postoperatorio.
Postoperatorio
Normalmente, el odontólogo le indicará al paciente que se aplique compresas tibias y húmedas con frecuencia. Acompañado de un medicamento antiinflamatorio esteroideo, como ibuprofeno, cada seis horas.
Enjuagues de agua tibia con sal cada dos o tres horas, durante tres o cinco días. Esto es para estimular el flujo sanguíneo local y ayudar a aliviar el dolor.
Aproximadamente, durante los siguientes siete días a la operación se recetan antibióticos orales.
Aquellos pacientes con infecciones significativas, suelen necesitar una dieta rica en nutrientes, debido a que antes del tratamiento el flemón pudo haber interferido activamente con la buena alimentación.
Contraindicaciones para un tratamiento de drenaje
- Cuando los pacientes presentan signos de que la infección se propaga rápidamente, un tratamiento de drenaje no es la primera opción. Más aún si la persona presenta fiebre alta, taquicardia y obstrucción de las vías respiratorias superiores. En estos casos, deben ser evaluados y tratados rápidamente en un departamento de emergencias.
- Otra circunstancia sucede cuando las infecciones que se extienden a la superficie de la piel. Por lo tanto, los pacientes son derivados a cirujanos orales o maxilofaciales directamente.
- El tratamiento no se recomienda en mujeres embarazadas, especialmente en el primer trimestre.
Alivio en casa del flemón dental
Aunque la principal recomendación es visitar al dentista, es probable que se tenga que soportar la incomodidad en casa mientras se espera la cita. En estos casos, se pueden seguir algunas recomendaciones para aliviar las molestias.
Aplicando un poco de calor
La aplicación de calor en forma de compresas húmedas y/o enjuagues bucales como terapia de apoyo en el tratamiento de las infecciones orofaciales, es altamente recomendado.
El calor produce vasodilatación, aumento de la circulación, lo que ayuda a agilizar la eliminación de los productos de la degradación de tejidos. Al igual que es una gran influencia para estimular las células defensivas y otros anticuerpos.
Analgésicos de venta libre
Uno de los rasgos de los flemones es que son dolorosos, por lo que las opciones como ibuprofeno o paracetamol, son ampliamente recomendadas.
Delicadeza y suavidad
Con el fin de evitar el drenaje involuntario del pus y correr el riesgo de contagiar otros dientes, extendiendo la infección, se recomienda cepillar los dientes delicadamente. Así como usar cepillos de cerdas suaves y evitar el hilo dental en la zona afectada. Por otro lado, también se aconseja optar por una dieta de alimentos blandos.
Los flemones dentales son de naturaleza polimicrobiana, comprendiendo varios tipos de bacterias, principalmente streptococcus y otras especies. Si no se trata en una etapa temprana, puede evolucionar rápidamente y extenderse a estructuras anatómicas adyacentes. Conllevando a complicaciones graves como septicemia, trombosis del seno cavernoso, absceso cerebral, shock y ocasionalmente la muerte.
La posibilidad de desarrollo de complicaciones, morbilidad y mortalidad, asociadas lo convierte en un importante problema de salud pública. En este sentido, el diagnóstico temprano es importante, con el fin de eliminar la fuente principal de infección.