10 Nov Alveolitis Dental: ¿Qué es? Tipos. Causas. Síntomas.

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Dr. Juan Cervera Espert

Nº colegiado 46004031. Especialista en Implantología Avanzada Rehabilitación Oral Cirugía, Periodoncia y resolución de casos complejos. Graduado en la Universitat de València. ------- Private practice as a Dental Surgeon. Master in Oral Surgery and Implant Dentistry, Stomatology Department. Faculty of Medicine and Dentistry, University of Valencia. Spain. Máster de Cirugía e Implantología oral de tres años en la Universitat de València.

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¿Qué es la Alveolitis Dental?

Definición de Alveolitis dental

La alveolitis, alveolalgia u osteítis alveolar, es una afección inflamatoria que puede surgir después de la extracción de un diente, en el espacio dejado por el diente luego de la extracción, conocido como alvéolo. La alveolitis está caracterizada por un dolor muy intenso en el paciente, el cual puede variar dependiendo del tipo de alveolitis que se presente, ya sea seca o húmeda. Por lo general, tiene lugar 48 o 72 horas después de la extracción, cuando el coágulo todavía está reciente y la cicatrización del alvéolo es aún temprana.

La alveolitis se produce muy a menudo debido a la la ausencia de formación del coágulo sanguíneo que debería surgir tras una extracción dental, lo que deja el alvéolo expuesto a infecciones y retrasa la cicatrización.

Origen del Nombre

El término alveolitis hace referencia, en su sufijo “itis”, a un proceso inflamatorio, que con el prefijo “álveo” de “alvéolo”, nos indica la localización de este proceso en el alvéolo, cavidad dental dentro del hueso, que alberga cada diente de nuestra dentadura.

A nivel etimológico, el término ‘alveolitis‘ se deriva de ‘álveo’, proveniente del latín ‘alveus’, que significa ‘cavidad’, y el sufijo ‘-itis’, que indica inflamación.

Causas de la Alveolitis

Pérdida del Coágulo

El coágulo formado en la cavidad alveolar cumple el objetivo de protegerla de cualquier objeto o agente externo que pueda tener contacto allí, como la comida que masticamos o el cepillo de dientes que usamos. Por razones que varían de paciente en paciente, este coágulo se desprende y deja desprotegida la cavidad.

Formación del Coágulo

La formación de coagulos en lesiones externas es un proceso natural del cuerpo para llevar a cabo una cicatrización exitosa, para proteger los tejidos importantes  y para evitar infecciones por agentes patógenos externos.

Factores de Riesgo de la Alveolitis Dental

Género

El sexo femenino es el más afectado, según diversos estudios, por los altos niveles hormonales de estrógeno en su ciclo menstrual.

Edad

Mientras que la buena vascularización del ligamento periodontal en personas jóvenes favorece la cicatrización, cuestiones como el tabaquismo y la falta de higiene pueden incrementar el riesgo de desarrollar alveolitis.

Historial de alveolitis

Cuando ya se ha sufrido de esta condición durante otros procedimientos de extracción, existe alta probabilidad de una tendencia del paciente a sufrir de alveolitis, dejándolo vulnerable ante probables repeticiones del cuadro.

Complicación del procedimiento

El proceso se determina como complicado cuando no se ha podido llevar a cabo una extracción directa y simple y se ha manipulado más tejido del necesario. Esto sucede cuando los dientes que se deben extraer están retenidos, es decir, parcialmente erupcionados, lo que significa que no han salido completamente del hueso.

Tabaquismo

Fumar puede provocar que el proceso de cicatrización se complique, se ralentice o se paralice. La nicotina y el monóxido de carbono disminuyen los niveles de oxígeno del cuerpo, lo que, durante procesos de cicatrizaje, es contraproducente.

Zona operatoria

Hay más casos de alveolitis en dientes mandibulares (inferiores) que en dientes maxilares (superiores). Esto ocurre debido a que, el hueso maxilar superior posee una mayor cantidad de venas y conexiones sanguíneas, que ayudan y previenen las infecciones y el desprendimiento de un coágulo en su etapa prematura.

Prevención de Infección bacteriana

Cepillarse mínimo dos veces al día

Limpiar nuestros dientes diariamente con un cepillo, así como complementar su uso con otros instrumentos como irrigadores e hilos dentales, nos ayuda a retirar los restos de comida que suelen causar infecciones dentales.

Realizar enjuagues bucales

Aparte del cepillado, los enjuagues bucales son un grandioso complemento para prevenir las infecciones en la alveolitis, ya que, con las propiedades antisépticas y antimicrobianas de sus componentes (clorhexidina, alcohol, entre otros) los microorganismos infecciosos serán erradicados de nuestros dientes, impidiéndoles penetrar en el alvéolo.

Se debe evitar el uso de enjuagues bucales con alcohol durante las primeras 24 horas tras la extracción para no irritar el área ni disolver el coágulo; después de este período, se pueden usar enjuagues con un agente antimicrobiano prescrito por un odontólogo.»

Masticar la comida lejos de la zona operada

Tenemos que ser muy cuidadosos con los alimentos que seleccionamos para la ingesta y la forma en que los masticamos. Cuando hay una alveolitis seca y el alvéolo está completamente desprotegido, lo más recomendable es ingerir alimentos líquidos o intentar masticar lejos de la zona operada.

Tipos de Alveolitis Dental

Alveolitis dental seca

También denominada como osteítis alveolar aguda, esta forma de alveolitis ocurre cuando, el coágulo que cubre al alvéolo luego de la extracción del diente, se desprende completamente, ya sea desintegrándose o perdiéndose. Esta perdida del coágulo sucede en una etapa prematura, donde aún no se ha completado la cicatrización del alvéolo, por lo que se produce un dolor intenso y un incremento de la vulnerabilidad del paciente ante las infecciones.

Alveolitis dental húmeda

También denominada como osteítis alveolar subaguda, esta forma de alveolitis ocurre cuando, el coágulo que cubre al alveolo no se desprende, pero supura y se encuentra de una coloración oscura. Por lo general, la alveolitis húmeda indica infecciones en el área, por lo que su tratamiento requiere antibióticos, asimismo, también es menos dolorosa que la alveolitis seca.

La alveolitis seca, ocurre cuando no se forma un coágulo sanguíneo o este se pierde, mientras que la alveolitis húmeda se caracteriza por un coágulo que se infecta y supura pus.

Síntomas de la Alveolitis

Dolor Intenso

El alveolo es una cavidad con diversos tipos de tejidos, entre los cuales resaltan el tejido nervioso y el tejido óseo. Estos nervios están conectados al alvéolo desde el cerebro, y viajan a través del rostro hasta llegar a la boca.

Cuando se presenta una alveolitis, (especialmente una alveolitis seca) estos tejidos quedan expuestos y al alcance de estímulos externos que, al mínimo contacto, pueden ocasionar un dolor intenso, desde el alveolo hasta lo largo de nuestra cara, razón por la cual es común presentar un dolor extendido hasta las mejillas y la sien.

Esto sucede debido a la sobreexposición de los nervios, tras no tener un coágulo que los proteja. La inflamación, los restos de comida y las temperaturas muy altas pueden desencadenar estas punzadas de dolor agudo, a menudo insoportables para el paciente que las padece.

Por lo general, este dolor puede prolongarse durante el tiempo que necesite el tejido para regenerarse en ausencia del coágulo. El periodo de recuperación varía de persona en persona, y depende del tipo de diente extraído, del historial clínico del paciente y del cuidado que se le dé al alveolo expuesto.

El dolor suele disminuir a medida que pasa el tiempo y se evidencia la cicatrización de la zona operada. Si el dolor no disminuye, debe dirigirse a su profesional de confianza, de este modo se podrá identificar la causa y dado el caso se indicarán otro tipo de analgésicos, diferentes a los analgésicos generales especificados anteriormente.

Mal Aliento

Durante la alveolitis pueden suceder, muy fácilmente, infecciones que perjudiquen al paciente. Entre los diferentes síntomas que pueden indicarnos que está sucediendo un proceso infeccioso, está la halitosis como signo fundamental. Las bacterias que suelen atacar durante la alveolitis producen una descomposición del tejido o de la comida atrapada entre los dientes, la cual, produce olores fuertes y anormales, que pueden resultarnos desagradables. La forma de evitar esto durante la alveolitis es complementar la limpieza dental con un enjuague bucal adecuado, pero siempre bajo la consulta del odontólogo o profesional a cargo, ya que, en algunos casos, este tipo de productos que normalmente combaten las bacterias, pueden llegar a empeorar nuestra condición.

Tratamiento de la Alveolitis

Es importante destacar que los tratamientos que se tomen para la alveolitis deben ser estrictamente supervisados y aprobados por un profesional medico. El autotratamiento con farmacos puede resultar altamente perjudicial y producir daños irreversibles en el paciente.

Analgésicos

El tratamiento farmacológico puede incluir antiinflamatorios como el celecoxib de 200 mg, siempre bajo prescripción y dirección de un profesional de la salud..

Antibióticos

Por lo general, no es necesario el uso preventivo de antibióticos en un cuadro de alveolitis, ya que la resistencia bacteriana de algunos pacientes puede ser alta, perjudicándolo irreversiblemente durante una ineficaz suministración de los antibióticos. En caso de que se detecte un proceso infeccioso activo, estos le serán recetados por su médico.

Cuidados Caseros

Enjuagues Salinos

Se tiene que disolver una cucharita de sal sin yodo en una taza de agua destilada. Debe hacerse sin yodo para no irritar las mucosas. Posteriormente, se toma de a sorbos y se enjuaga la boca durante treinta segundos, luego se escupe y se repite el proceso varias veces durante el día, preferiblemente una hora después de comer.

Evitar Irritantes

Las comidas y bebidas muy calientes pueden dificultar la recuperación de una alveolitis. Asimismo, los alimentos pegajosos o duros, o ácidos y picantes, pueden irritar el tejido del alvéolo, produciendo inflamación y dolor.

Prevención de la Alveolitis

Seguir Indicaciones Post-Extracción

Las extracciones dentales son procedimientos quirúrgicos complejos, que solo pueden ser ejecutados por profesionales para garantizar la salud del paciente. Sin embargo, el papel del especialista en la salud del paciente también abarca el periodo postoperatorio, donde se dan las indicaciones específicas a seguir, para asegurar una recuperación exitosa y sin complicaciones. Por el contrario, cuando estas indicaciones no son cumplidas, se pueden presentar afecciones como la alveolitis dental. Es relativamente sencillo desprender un coágulo sanguíneo, por lo que se recomienda tener especial cuidado durante la recuperación con las cosas que nos llevamos a la boca, la forma en la que nos cepillamos, la comida que comemos y la fuerza con la que masticamos.

No Fumar

Se recomienda no fumar porque, además de retrasar la curación de las heridas, también afecta el corazón, glándulas, sistema nervioso central y vasos sanguíneos.

Alimentación Adecuada

Alimentos blandos y suaves

Los alimentos faciles de masticar son ideales para un caso de alveolitis, donde es puntual evitar dañar, irritar o tocar innecesariamente la zona que ha sido operada durante la extracción. Alimentos como estos pueden ser sopas, yogur, helado, batidos, papillas, etc.

Alimentos ricos en nutrientes

Ya que la dieta es muy limitada debido a la necesidad de optar por alimentos blandos que no perjudiquen el alvéolo, es crucial seleccionar aquellos que nos aporten nutrientes en grandes cantidades tras su ingesta, garantizando así una rapida recuperación.

Alimentos frios

Ya que la alveolitis es una inflamación de los tejidos del alvéolo, los alimentos fríos y blandos pueden ayudar en la reducción natural de la inflamación y del dolor, como excelentes complementos en el uso de analgésico

Si necesitas más información sobre Alveolitis dental y salud bucodental no dudes en ponerte en contacto con Artdenta. Puedes visitar a tu Clínica dental Artdenta en Valencia en la Avenida Primado Reig, 137 o llamándonos al 963 693 329. Estaremos encantados de atenderte.